jueves, 23 de septiembre de 2010

Política blobelia (completo)

Ópsel empujó suavemente la puerta con un pseudópodo y acercó el sensor óptico a la hendija: dentro del cubículo, Senanderf tamborileaba con los minitentáculos sobre el sostén de la terminal comunicativa. Entró.
- ¿Cómo va todo?
Senanderf giró el apéndice polisensorial y después el resto del cuerpo para quedar frente a su colega.
- ¡Mal!
- Uy, pobre. Nada de avances en Cebilga, me imagino.
- ¡Nada de avances sería un avance: se las arreglan para ir para atrás!
- Ja.
- ¡Es que no se puede creer! ¡Son unos artistas de la complicación!
- ¿Para tanto?
- ¡Pero sí! Mirá: viste la estatestía vecina de Sespiabojas?
- Ajá.
- Se supone que es el mismo sistema: el Estatesta nombra un informador, que informa y luego un formador que forma el gobierno y yastá, ¿no?
- Ajá.
- Bueno: en Cebilga ya pasaron un informador y un ¡pre-formador! sin éxito. Ahora hay dos “mediadores estatestales”.
- ¡Ja!
- Y otras veces hubo un “explorador estatestal”. Todo muy bueno para los comentadores gráficos alegradores de los cotidianos informacionales, por supuesto.
- Es cierto que es singular. ¿Y entonces? ¿Vas a pedir un traspaso de división temática?
- ¡Ni alterado en mis capacidades mentales! ¡A mí de política interzonal no me saca nadie!
Ópsel fijó un momento su apéndice en dirección al otro blobelio.
- No entiendo. ¿Te volviste incomodófilo?
Senanderf emitió el código de sonido alegre (clave J-A repetida).
- No. Más bien quiero incomodar otros.
- Ja. ¿A algún grupo en particular de la blobelidad?
- Por supuesto: a los que descubrieron de pronto que el devancerismo es la causa de todos los males de nuestra zona, que desaparecerían si pasáramos a un sistema asambleario como el de Cebilga.
- Entiendo: lo tuyo es una tarea educativa.
Código de sonido alegre de Senanderf.
¡Exacto! El devancerismo no es mejor ni peor que el asamblearismo. Lo que no deja de ser una casualidad notable es que los convertidos a las virtudes del asamblearismo lo sean justo cuando no ocupan el poder.
Sonido alegre de Ópsel. Senanderf:
- Es que eso de que el devancerismo es demasiado personalista no vale un ñúfux, qué curioso que lo descubran quienes no consiguen que los voten para devancero. Y todo, por supuesto, en nombre de "construir la cosacomún". Nuestra cosacomún devancerista no es suficientemente cosacomunal, claro que no: la verdadera cosacomún es asamblearia. Porque sí: las verdades reveladas no se discuten.
- Me encantó, Senanderf, me convenciste.
- Pero vos ya estabas convencido. Otros no, y por ellos me canso el sensor óptico buscando información sobre Cebilga, ese "paraíso asambleario". A los cebilgos se las caería el apéndice polisensorial de tanto emitir sonidos alegres si se les dice que sus sistema es la perfeción máxima.
Ópsel arqueó ampliamente hacia arriba las comisuras de la abertura sonoemisora. Saludó con el pseudópodo y giró hacia la puerta. Senanderf siguió pulsando el tablero de la terminal comunicativa. 

3 comentarios:

Comandante Cansado dijo...

Aquí está completo el relato que comencé en el post anterior. Espero que el pasaje a la ficción le resulte aceptable al amable lectorado anarcofacilonguista. En el próximo posteo, otro comienzo de relato.

Ricardo dijo...

Me gustó.
Me cayó bien además el blobelio bloguero.

Saludos.

Comandante Cansado dijo...

Al menos un lector del blog al que no espanté con el pase a la ficción, uf. Gracias, Ricado. Y a mí también me cae bien, je (¡volverá!).