Salvo excepciones, los libros de poesía se venden muy poco. De ahí que resulte un poco curioso ver listas de los libros de poesía más vendidos. En principio, serían necesarias precisiones (vendidos dónde, y sobre todo en cuántos ejemplares). De todas formas, cabe cuestionar el sentido en sí de la lista. Teniendo cuenta el (escaso) lugar de los libros de poesía en el contexto literario actual, ¿de qué sirve el Top Ten? ¿Qué favorece?
Si la poesía se vende poco, y su circulación se suele dar fuera del circuito cultural mainstream, es un contrasentido una lista que excluirá a las editoriales más pequeñas o independientes. Si llegase a tener algún efecto en las ventas de los libros de poesía en general, el eventualísimo efecto derrame no iría más allá que el de las poquísimas editoriales incluidas (4, con seis libros de una sola editorial). Por otro lado, hace de cuenta que la poesía es un consumo cultural relativamente masivo como cualquier otro (más allá de que esto se considere o no deseable, simplemente no es cierto).
Actores del mundo poético (lectores y todos aquellos que les permiten ser tales, je), ¿qué opinan?
Absolutamente de acuerdo, no es un consumo cultural como otro (la palabra "consumo" dice mucho sobre la mercantilizacion de la cultura), y no circula por los mismos canales. No es que me escandalice la lista, simplemente me parece una estrategia de marketing pensada para mantener las ventas, en ese sentido no esta mal, le hace creer al lector no tan asiduo que ese es el canon que tiene que tener en su biblioteca, y por qué no?
ResponderEliminarHola, LC. El tema es que invisibiliza toda producción poética (la mayor parte) que no circule por ese circuito.
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